lunes, marzo 01, 2010

Y tú, nunca lo sabrás



Lucky I’m in love with my best friend. Lucky to have been where I have been [...] They don’t know how long it takes waiting for a love like this ♪ Lucky - Jason Mraz


Yo te miro. Tú me miras. Pero nunca nos miramos a la vez. Me sonríes. Te sonrío. Pero nunca nos sonreímos a la vez. Tú caminas. Yo camino. Pero nunca caminamos juntos. Solo vives. Sola vivo. Pero nunca viviremos para el otro. Tú sabes casi todo. Yo solo sé de ti. Pero nunca sabrás de este amor. Jamás. Tú amas. La libertad. El sol. El mar. La música. Los sueños. Yo solo te amo a ti.

En silencio mi corazón grita tu nombre. Mi amor llena la habitación. Mi esperanza vuela libre entre las curvas de tu cuerpo. Mi ilusión te dirige miradas locas. Pasionales. Mi mente trabaja a mil por hora creando una historia sobre un lienzo en blanco. Llenándolo de color, de vida, de luz, de amor. Dibuja mariposas multicolores. Dibuja caminos sin final. Dibuja arcoíris de más de siete colores. Dibuja vestidos blancos, trajes elegantes y escribe “sí, acepto” por doquier.

En silencio te miro. Fascinada. Te contemplo. Encantada. Te idolatro. Y cuanto más eres tú más yo te amo. Tu pasión al crear me desarma. Tu sabiduría al debatir me orgullece. Tu humildad al actuar me conmueve. Tu fuerza al enfrentar los retos me alienta. Tu voz y gestos me hechizan. Todo tú tiene el poder de moverme como a marioneta al abrirse un telón.

Siempre te soñé. Soñé que me besaras. Soñé que me amaras. Soñé que unas tu vida a la mía. Que unas tu cuerpo con el mío. Que nuestras almas se conozcan. Soñé que sonrías de lado. Tan sensual. Tan provocador. Solo para mí. Y por mí. Soñé que me contemplaras como a pieza cara de museo. Que me miraras con paciencia y amor. Que llenaras de caricias mi piel como a un cristal de exhibición. Con timidez. Temblando. Porque a un lado dice “prohibido tocar”.

Siempre te soñé hablándome. Hablando de tus sueños. De tus éxitos y tus fracasos. Hablando de tu día a día. De lo bueno y de lo malo. Hablando de tu pasado. De tu niñez y de tus amores. Hablando de tu futuro. De tus anhelos y de tus temores. Oír tu voz acariciándome. Sin quererlo. Sin proponértelo. Áspera. Profunda. Segura. Oírte invitándome a salir. Oírme aceptando presurosa. Oírte llamándome por mi nombre. Viéndome temblando con solo escucharte nombrarme. Oírte pidiéndome un baile. Viéndome bailando contigo. Lentos. No al ritmo de la música. Al ritmo de nuestros corazones. Tímidos. Inseguros. Temerosos ante lo nuevo. Aunque tú no eres nuevo para él. Oírte anunciándome que me besarías. No una pregunta. No una insinuación. Sino una afirmación. Una advertencia. Viéndome recibiendo tu beso. Sincronizados. En cámara lenta. Explorando. Deseosos. Presurosos. Apasionados. En cámara rápida. Inseguros. Descubriendo. Aceptando.

Siempre te soñé besándome. Besando mis labios. Mis miedos. Mis alegrías. Besando mi seguridad. Mi inseguridad. Mi confianza. Besando mi alma. Mis sueños. Mis fracasos. Besando mi corazón. Mi dolor. Mi felicidad. Oírte invitándome a ver las estrellas. El firmamento y sus misterios me apasionan. Tú lo sabes. Viéndome seguirte sin hablar. Muda. Esas mariposas me vuelven muda. Oírte explicándome tu teoría sobre los sentidos, las sensaciones y tus sentimientos. Viéndome observándote embriagada de tu voz. Oírte preguntándome algo. Saber que es una pregunta por el interés en tu mirada. Saber que es una pregunta por el ligero temblor en tu voz. Saber que es pregunta porque callas de repente. Esperando mi respuesta. Pero, ¿qué podía responder cuando ni me había enterado de la pregunta?.

Siempre te soñé amándome. Amando mi corazón. Mi credo y mi alma. Amando mis defectos. Mi impaciencia y mis impulsos. Amando mis virtudes. Mis valores y mis aciertos. Amando mi vida. Mis alegrías y mis miedos. Tú fuiste el culpable de mi éxtasis. Tú por besarme tan bien. Por hacer que mis pies se sintieran sobre nubes. Por hacer que mis cuerdas vocales se entumezcan. Y porque mi cerebro elija ese momento para dejar de trabajar. Oírte decirme lentamente. Sílaba por sílaba. “Cre-o-que-te-a-mo”. Viéndome parpadear varias veces. Incrédula. Hipnotizada por tu voz. Por tus ojos. Por tu boca. Por tu aliento confundido con el mío. Por el sabor de tus labios. Por el recuerdo de ese beso. “No, no-creo, lo-sé”. Oírte nuevamente. Silencio. Viéndome continuar en mi embeleso. Tonta. Si no dejas de mirarme de esa forma seguro que moriré. Seguro. Oírte susurrándome “Te-a-mo”. Sí, moriré. Y viéndome respondiendo con un beso. Tratando de decir algo que no se puede traducir con palabras. Solo con un beso.

Siempre soñé lo que solo puedo soñar. Siempre deseé lo que no puedo cumplir. Siempre esperé lo que nunca llegaría. Siempre imaginé real algo que tan solo en la mente debe quedar. Y me sueño abriendo los ojos. Y abro mis ojos. Y estoy sola. En un rincón. En la oscuridad. Compartiendo el aire con mi soledad. En el río de mis lágrimas. Sin tu voz. Sin tus ojos. Sin tu boca. Menos sin tus besos. Sola. Disimulando el dolor descubro que todo fue un sueño. Solo puedo amarte, besarte, tocarte en mis sueños. Tonta al creer que algo así puede ser real. Solo era un sueño. Mi sueño. Y tú, nunca lo sabrás.






♪ He pensado en suplicar un sorbo de tu intimidad. He soñado con beber en las fuentes de tu piel. Y ver amanecer, allí después [...] Es inútil repetir que me muero por ti. Y en el silencio de mi voz te grito con el corazón: "Nadie te amará igual que yo". ♪ Pero nunca lo sabrás - Jan


εїз Si has llegado hasta aquí, ¿qué te cuesta dejarme un comentario?. Con tu aliento yo siguiré viviendo... Hazme feliz.

εїз